Hola hola!!! Esta receta llevaba mucho tiempo queriéndola hacer... Se trata de un bizcocho del que me declaro "fan" porque tiene una textura que me encanta y está buenísimo. Es el que se suele utilizar para hacer tartas que van recubiertas. Si lo utilizas para hacer una tarta, te recomiendo que uses almíbar para que no quede seco.
No lleva levadura, ya que serán las claras montadas lo que hará que suba. Su sabor me recuerda a los mostachones. Os cuento cómo se hace...
Los ingredientes que hacen falta son:
- 150 grs harina de repostería
- 150 grs azúcar
- Media cucharadita de esencia de vaainilla
- 6 huevos
RECETA:
Comenzamos separando la clara de la yema. Reserva las claras. Añade el azúcar y la vainilla a las yemas, y con la ayuda de unas varillas bátelo hasta que quede esponjoso y una mezcla blanquecina.
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| Reserva. |
Añade a la masa de yemas y azúcar, dos cucharadas de harina y dos de claras montadas. Ve realizando movimientos envolventes hasta que se integre todo bien. Ve repitiendo la operación hasta que se acaben ambos ingredientes.
Una vez que tenemos hecha la masa, cogemos un recipiente redondo desmoldable y le ponemos un papel de hornear abajo para después poderlo sacar bien.
Precalienta el horno a 180ºC y ponlo unos 30-35 minutos. Estará cuando piches con un palillo y salga limpio.
Una vez hecho, para desmoldarlo, pasa un cuchillo por los bordes y ponlo en una rejilla hasta que se enfríe.
Ya está listo para elaborar tartas o consumirlo así. Espero que lo disfrutéis.
Conservadlo en un recipiente que no tenga contacto con el aire o en una bolsa de plástico para evitar que se endurezca. ¡Saludos!
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